La primera vez. La primera vez de algo.
Esta fue la primera tira que hice para la sección “A CUESTAS CONMIGO” que luego renombre “A RATOS CONMIGO” del suplemento ON.
Hace ya 4 años de mi colaboración semanal.
Recuerdo que cuando dibujaba esa primera las manos y los brazos me pesaban mucho, yo que no soy de ajustar ni de borrar, y con esa dude mil veces. Muevo un poquito la mano hacia la derecha, demasiada grande la cabeza…
Claro que había dudas. Claro que quería que gustase, en redacción a les lectores, a mis amigues… Pero había algo que ayudaba para campear ese peso. Esa ilustración a mi me gustaba.
No sabría decir bien el porqué, si por el uso fondo en blanco que hacía que resaltase mi ilustración y no me escondiera tanto entre fondos, si porque había algo muy real en mi que había captado muy bien esa ilustración, y por lo tanto y en tanto que real, podría resonar en algún otre…,daba igual lo que fuera, lo importante era que a mi me decía algo. No era de mentira. Entendiendo mentira como algo alejado de mi, que no me toca.
Cuatro años después, sigo con esa marca a la hora de dibujar. Ya no me pesan los brazos, eso sí.
Pero se diferenciar perfectamente cuando estoy de cuando no estoy. También en el dibujar.
Si hay algo que no desaparece es cierto vértigo que se produce al soltar al entregar algo.
Pero eso es distinto, ese vértigo siempre me gusto.
Siempre me encantó tirarme corriendo al agua y cambiar o mutar de superficie.
LANZARSE AL AGUA COMO DIBUJAR